La disfagia en ancianos, un problema común en adultos mayores

Artículo realizado por el Equipo de TKE Home Solutions

Viernes, 12 de agosto de 2022, 14:30

Llegada cierta edad, las personas ancianas pueden presentar un problema bastante típico a la hora de ingerir los alimentos. Nos referimos a la disfagia que puede definirse como la dificultad para tragar. De esta manera, nuestro organismo necesita invertir más tiempo y esfuerzo a la hora de masticar e incluso para tragar líquidos. Tal problema puede resultar hasta doloroso e impedir hasta la deglución. Sin duda, estamos ante una situación a la que debemos prestar especial atención. Vamos a ver cómo.

¿Qué es la disfagia?

Aunque la disfagia es frecuente en adultos mayores, puede irrumpir a cualquier edad. Sin embargo, es cierto que un problema como el descrito, cuando sucede de manera esporádica o aislada, no reviste de mayor gravedad, las complicaciones surgen cuando estamos ante una molestia permanente que impide que la persona se pueda alimentar con normalidad.

Principales síntomas de la disfagia

No solo hablamos de una dificultad para tragar, pues hay otros muchos más síntomas que nos pueden alertar acerca de la existencia del problema. Los vemos a continuación:

Dolor al tragar.
Imposibilidad de tragar.
Pérdida de peso.
La sensación de que la comida se queda atascada en la boca del estómago.
Babeo.
Mal aliento.
Ronquera
Regurgitación o vómitos.
Acidez estomacal frecuente.
Tos o arcadas al tragar.

Tipos de disfagia

Además, podemos hablar de diferentes tipos de disfagia como las que siguen:

Disfagia orofaríngea

Existe un debilitamiento de los músculos de la garganta por alguna enfermedad.

Disfagia esofágica

La persona tiene la sensación de que los alimentos se pegan o se quedan atascados en la base de la garganta o en el mismo pecho.

Disfagia mecánica

Se denomina así porque surgen alteraciones en las estructuras que intervienen en el proceso deglutorio.

Disfagia neurológica

Tras una enfermedad o una lesión neurológica la persona percibe dificultades para deglutir con normalidad.

Principales causas de los problemas para tragar en personas mayores

El envejecimiento es la principal causa de que las personas mayores no pueden ingerir alimentos. Así, nos encontramos ante el desgaste natural del esófago, además de existir un mayor riesgo de sufrir un accidente cerebrovascular o la enfermedad de Parkinson.

¿Cómo alimentar a un anciano con disfagia?

Si no poder tragar es un problema para la persona, parece que tendremos que tomar medidas al respecto para facilitarle esta tarea. Las detallamos de inmediato:

Comer con la espalda recta en un ángulo de 90º.
No hablar durante la comida y evitar las distracciones.
Desmenuzar la comida en trozos pequeños.
Masticar lentamente.
Optar por una dieta blanda.
Si no se puede beber con normalidad, podemos recurrir a los llamados líquidos para la disfagia.
Machacar las pastillas que debemos tomar, siempre que esto sea posible. Por este motivo, debemos consultar previamente al médico.
Ingerir alimentos calóricos, como batidos o huevos, si observamos que hay una bajada de peso preocupante.
Sustancias como el alcohol, la cafeína o el tabaco pueden empeorar la acidez estomacal.

En el caso de que todo lo anterior fracase, habría que considerar la posibilidad de alimentación mediante sonda.

Sin duda, la disfagia es un problema que requiere atención médica cuanto antes, sobre todo entre ancianos que viven solos y que pueden sufrir un atragantamiento en su casa sin que nadie pueda acudir en su socorro.

Por todo ello, es importante que les acompañemos durante las comidas para que podamos ayudarles en todo momento y que, en definitiva, se sientan más seguros durante el proceso.

Preguntas frecuentes sobre la disfagia en ancianos

¿Cómo se realiza el test de deglución?

Dependiendo de los síntomas, el profesional le hará las pruebas que considere pertinentes. Con carácter general, hablamos de una breve entrevista acerca de sus síntomas y duración a la que seguirá un ofrecimiento de diferentes alimentos y bebidas para tragar, como agua junto con alimentos blandos y sólidos

También se le examinarán los dientes, los labios, la mandíbula, las mejillas y el cuello mientras trata de comer.